El secretario general de la ONU, António Guterres, urgió a los miembros del G20 a una acción decisiva frente al cambio climático y pidió la descarbonización completa de sus sistemas de generación para 2035.
Durante un encuentro del bloque, reunido por primera vez en la sede de Naciones Unidas en coincidencia con el segmento de alto nivel de la Asamblea General, Guterres reiteró un llamado para que sus miembros lideren la transición.
“Para 2030, la producción y el consumo mundial de todos los combustibles fósiles deben disminuir al menos en un 30 por ciento, y la capacidad mundial de energías renovables debe triplicarse”, remarcó.
El máximo responsable de Naciones Unidas agradeció la convocatoria de la presidencia brasileña del G20 para este encuentro y su enfoque sobre el hambre mundial al recordar la necesidad de “intensificar los esfuerzos para poner fin a esta afrenta a nuestra humanidad común”.
«Es vergonzoso que en nuestro mundo de abundancia, alrededor de una de cada diez personas pase regularmente un día entero o más sin comer, lo que se conoce como inseguridad alimentaria grave», lamentó.
En la reunión, el grupo adoptó formalmente un Llamado a la acción sobre la reforma de la gobernanza global, una propuesta que busca comprometer a esas naciones con el fortalecimiento del sistema multilateral y la transformación y modernización de las principales organizaciones internacionales.
El bloque está integrado oficialmente por Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Francia, Alemania, India, Indonesia, Italia, Japón, la República de Corea, México, Arabia Saudita, Sudáfrica, Rusia, Türkiye, Reino Unido y los Estados Unidos.
Junto a esos estados, dos grupos regionales forman parte de la alianza: la Unión Africana y la Unión Europea.