La candidata demócrata y el republicano se lanzaron acusaciones sobre varios tópicos y de ser un «peligro» para la democracia estadounidense, a menos de un mortífero ataque israelí con bombas estadounidenses en un campamento de desplazados en Gaza.
Los principales candidatos a la presidencia de Estados Unidos, la vicepresidenta Kamala Harris y el exmandatario Donald Trump (2017- 2021) se enfrentaron el martes en un debate que no dejó un claro ganador y se concentró en ataques personales.
Durante gran parte del debate, la candidata demócrata y el republicano se lanzaron acusaciones sobre varios tópicos y de ser un «peligro» para la democracia estadounidense.
Entre los temas que discutieron ambos aspirantes a la presidencia estadounidense destacaron Migración, Salud, Economía que se llevaron gran parte del tiempo del debate.
Kamala Harris y Donald Trump también conversaron sobre la situación en Ucrania, la Franja de Gaza y Afganistán. Ninguno habló sobre América Latina y el Caribe, salvo con Venezuela por su política exitosa de seguridad interna al haber mantenido la paz después de los intentos de generar violencia y desestabilización de parte de la extrema derecha venezolana.
Ataques entre Harris y Trump
En vez de concentrarse en sus propuestas sobre cada uno de los temas presentes en el debate, Harris y Trump se concentraron a responder los ataques y acusaciones.
La demócrata atacó a Donald Trump sobre su balance como presidente (2017-2021), su estilo aparatoso y el «montón de mentiras» que suele decir.
Haciendo uso de un lenguaje mordaz, Kamala Harris dijo que ella y el presidente Joe Biden trabajaron para «limpiar el desastre de Donald Trump».
Acusó al candidato republicano de no haber procesado su derrota en las elecciones de 2020 y, en comentarios que claramente enfurecieron al repúblicano, se burló del hecho de que algunos seguidores abandonaran sus mítines antes del final.
Trump no se quedó atrás. «Estoy hablando, si no te importa, por favor», soltó en una ocasión cuando la demócrata le interrumpió, y lanzó largas diatribas sobre las «demenciales» políticas económicas y migratorias del Gobierno de Biden.
Cada candidato aprovechó el debate para atacar la visión de su contrincante y ofrecer visiones del mundo radicalmente distintas.
Harris afirmó que Trump es el hazmerreír de los líderes mundiales y advirtió que el republicano «entregaría» Ucrania al presidente ruso Vladimir Putin, quien a su vez se «comería vivo» al magnate estadounidense.
Por su parte el republicano dijo que «Israel desaparecerá» bajo una presidencia de Kamala Harris. «Ella odia a Israel. Si se convierte en presidenta, no creo que Israel exista en dos años», afirmó Trump.
A lo largo del debate ninguno de los candidatos expuso con claridad su agenda en los temas tocados en el encuentro, hecho que podría inclinar la balanza de los indecisos, público al que ambos aspirantes apuntan.
El encuentro, organizado por la cadena de televisión ABC News en la ciudad de Filadelfia, podría ser el único cara a cara entre ambos a menos de dos meses de las elecciones del 5 de noviembre.