Las autoridades del Instituto Autónomo Consejo Nacional de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes (Idenna), solicitaron a la oficina del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), que se pronuncie ante la aplicación de una “ley de guerra” contra la población civil y migrantes venezolanos, especialmente menores de edad, que han sido secuestrados y cuyos derechos humanos son violados de manera flagrante mediante deportaciones masivas, ilegales y criminales.
En la mañana de este lunes, la presidenta del organismo, Anahí Arizmendi, denunció la falta de protección integral y los derechos de los niños, niñas y adolescentes que se encuentran migrantes en los Estados Unidos y repudió la llamada “Ley del Enemigo Extranjero”, en la que se basó el Gobierno estadounidense para deportar a 238 venezolanos a El Salvador durante este fin de semana, y que la nación Bolivariana denuncia, no solamente por considerarla como violatoria de los derechos humanos, sino también por criminalizar a la migración.
La presidenta del Idenna entregó ante el organismo un comunicado en el que solicita al representante adjunto de Unicef Venezuela, José Ramón Espinoza, a pronunciarse ante la orden emitida por el Gobierno de Donald Trump en Estados Unidos de detener “a todos los venezolanos que tengan al menos 14 años de edad, sin la garantía de un debido proceso».
Esta conducta coloca a la población migrante infanto-adolescente, que estén naturalizados o sean residentes permanentes legales, en estado de indefensión y con el riesgo de ser enjuiciados como adultos al pretender vincularlos con organizaciones como el ‘Tren de Aragua’”, según reza el documento oficial.
De igual forma, la misiva destaca denuncias realizadas por organizaciones de derechos humanos en EE. UU., según las cuales se cometen permanentes abusos en los centros de detención de niños y niñas migrantes.