El secretario ejecutivo de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), Jorge Arreaza, realizó una jornada de debate centrada en los efectos de las sanciones unilaterales, espacio que contó con la participación de representantes juveniles de movimientos y partidos políticos de América Latina.
El encuentro fue llevado a cabo en la sede del Movimiento Futuro, en Caracas, en el que también se discutió el rol del referido bloque regional con el propósito de realizar un “modelo ALBA” donde la juventud pueda experimentar cómo se vive una plenaria del organismo de integración. Dicha reunión forma parte de las actividades previas al 20 aniversario del ALBA-TCP, a celebrarse el próximo 14 de diciembre.
En tal sentido, Arreaza destacó la necesidad de fortalecer la cooperación regional frente a desafíos como las crisis climática y económica. “Los pequeños países del Caribe han sido golpeados por estas sanciones, que no solo buscan debilitar a Venezuela, sino a toda una red de solidaridad regional. Es hora de avanzar juntos en un sistema de gestión de riesgos y cooperación efectiva”, apuntó.
En el lugar, el viceministro de Políticas Antibloqueo, William Castillo, expuso cómo las medidas coercitivas unilaterales han afectado a distintos sectores en Venezuela, desde la economía hasta el deporte. “Hemos visto cómo atletas venezolanos pierden oportunidades de competir porque no pueden entrenar en el extranjero debido a bloqueos de federaciones, cuentas o no aprobación de visas. Esto es una sanción directa al país, y las consecuencias son reales”, recalcó.
Durante la actividad, los participantes abordaron los diferentes ejemplos concretos de los impactos de las sanciones, desde el deterioro de servicios públicos en la nación Bolivariana hasta el bloqueo de suministros esenciales a la población cubana.