El cardenal Baltazar Porras fue al Vaticano con el objetivo de convertirse en protagonista el pasado 19 de octubre, con el fin de desviar la atención de la ceremonia de canonización de José Gregorio Hernández, afirmó el secretario general del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello.
Durante la transmisión del programa “Con El Mazo Dando”, por Venezolana de Televisión (VTV), Cabello afirmó: “Baltazar Porras fue para allá para hacer lo que sabe hacer: ser el protagonista y no José Gregorio Hernández; que él fuera la noticia y no la canonización de José Gregorio Hernández”, expresó Cabello.
El líder revolucionario destacó que este comportamiento lleva tiempo en la gestión de Porras al frente de la iglesia y que sus acciones contribuyeron a retrasar el reconocimiento oficial al Médico de los Pobres como santo.
“Eso fue lo que hizo y lo que ha hecho durante años mientras ha estado al frente de la Iglesia Católica en Venezuela: impedir que José Gregorio Hernández fuese santo, lo que hizo fue impedir y retardar”, subrayó.
Jerarquía eclesiástica no tiene moral
Por otra parte, Diosdado Cabello manifestó que la jerarquía eclesiástica no tiene moral para regañar a alguien del pueblo. “Ellos no son hombres de Dios, los hombres y las mujeres de Dios son los que están en el Pueblo”, expresó.
Relató una historia en la que asistió a una reunión con representantes de la iglesia católica del país por instrucción del Comandante Hugo Chávez. “Yo estaba esperando que llegara Baltazar Porras, pero no se me dio el milagro”, afirmó.
Cabello narró que cuando le dieron el derecho de palabra “les dije hasta del mal que se iban a morir a todos y que debían pedirle perdón al Pueblo”.
Apuntó que en esa reunión coincidió con un sacerdote que le recordó que en su época de estudiante había sido expulsado de un centro de estudios porque él lo había solicitado, siendo párroco del pueblo, porque cada vez que Cabello manifestaba junto a otros estudiantes “se le metía el humo de los cauchos quemados en la casa parroquial”.
“Yo le dije que era un irresponsable pues así como había hecho conmigo, hizo con otra compañera, que tras ser expulsada se fue a la guerrilla y siendo parte de ella la mataron. Ellos no tienen moral”, puntualizó.