Funcionarios de salud en la Franja de Gaza han denunciado hoy que la agresión israelí, iniciada el 7 de octubre de 2023, ha dejado un saldo devastador de 55.432 palestinos fallecidos y 128.923 heridos, sumando más de 184.000 víctimas. La mayoría de los decesos corresponden a mujeres y menores de edad, según informaron fuentes médicas a la agencia oficial de noticias palestina.
La situación humanitaria es crítica, con miles de personas que aún se cree están sepultadas bajo los escombros en el enclave costero. Las autoridades gazatíes acusaron recientemente a las tropas israelíes de asesinar a 20 ciudadanos y herir a más de 200 al disparar contra una multitud que buscaba alimentos en un centro de distribución. Este incidente se produce en un contexto de bloqueo israelí, que desde principios de marzo impide la entrada de alimentos, medicinas, combustible y otros productos esenciales.
Philippe Lazzarini, comisionado general del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA), alertó este lunes que la tragedia en Gaza persiste sin tregua, a pesar de que la atención mediática se desvía hacia otras zonas. En un comunicado, Lazzarini subrayó que «decenas de personas murieron o resultaron heridas en los últimos días, incluidas personas hambrientas que intentaron obtener alimentos dentro de un sistema de distribución letal».
El funcionario de la ONU también señaló las persistentes restricciones a la entrada de ayuda humanitaria, a pesar de la disponibilidad de cargamentos listos para ingresar a la Franja. Además, advirtió sobre la grave escasez de combustible, que obstaculiza la prestación de servicios básicos, particularmente en salud y distribución de agua, exacerbando la ya precaria situación de la población.